Vengo escuchando música desde que tengo memoria. En el auto de papá, en el combinado de la abuela, ventajas de pertenecer a una familia musical, que sin llegar a ser fanática, me hizo sentir la importancia que se merece.
Por voluntad propia desde los seis años con el compilado de Kiss que traía 3 temas de cada integrante, extraídos de sus discos solistas. Un casete comprado en una feria, que el estéreo del auto me morfó y le puse cinta adhesiva para poder seguirlo escuchando, el resto es mi historia musical.
A lo largo de décadas forjé mis gustos musicales, a base de una escucha constante en la radio, en casetes grabados, discos de vinilo, CDS y mp3s.de diversas calidades.
En este post quiero comentarles sobre mis 10 mejores discos. Y digo míos porque los acuñé, los incorporé a mi ADN y no los cambio por nada.La elección es netamente subjetiva y seguro quedaron muy buenos discos afuera.. Pero estos son esos que no puedo evitar escuchar de principio a fin. Si no puedo hacerlo, no los pongo. Me los llevaría a una isla desierta y no me aburriría nunca de ellos. Crecí con ellos sonando fuerte en cada una de mis moradas. No podría ordenarlos, son geniales por donde los escuche. Me remontan a personas, lugares, hechos y situaciones de mi vida.
Quiero compartirlos con ustedes e invitarlos a que hagan ese ejercicio en sus casas. Solo para melómanos, el resto no lo entendería. Ahí les van:
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